Ubicado en la calle Florencio Escardó, el complejo realza los valores de la zona y se
implanta como una intervención que inyecta vida al barrio.
Se parte de un retiro lateral, el cual genera una franja de acceso con jardines y funciona
como espacio aliviador de las tipologías del bloque frontal. El bloque posterior del predio
plantea un retiro de la medianera, estableciendo dos tipologías que viven del espacio patio posterior,
y tienen también visuales hacia la fachada principal en dos niveles.